Llevo una semana como Willy Fog, saltando de un sitio a otro y sin tiempo para actualizar la sarta de inconveniencias que constituye este blog. Imagino que no habrán pegado ojo.
Pero no quiero dejar pasar uno de los momentos más divertidos que han tenido lugar en el espinoso debate de la política de inmigración estadounidense: la comparecencia del cómico Stephen Colbert en el Congreso para hablar de los temporeros extranjeros que trabajan en su país.
Les resumo los antecedentes: en medio de la ofensiva del Partido Republicano y los grupos más conservadores contra la "ocupación" de los puestos de trabajo de los americanos, el Sindicato de Trabajadores Agrarios puso en marcha la campaña TakeOurJobs.org (algo así como "tomad nuestros trabajos"). La campaña pretende demostrar que no hay estadounidenses bien peinados y de clase media que quieran recoger y empacar la fruta y verdura, y para ello ofrecieron empleo a cualquiera que quisiese tomarlo. En un país con cerca de 10 millones de personas desempleadas y subempleadas, solo 16 individuos respondieron a la oferta.
Uno de ellos fue Stephen Colbert, uno de los cómicos más ácidos e irreverentes de la televisión norteamericana, en la que su personaje representa a un conservador histriónico y excesivo. Precisamente fue su personaje el que trabajó durante una jornada en una de las granjas, una experiencia que está reflejada en este desternillante vídeo.
Pero lo mejor es que todo este asunto dio lugar a que una congresista demócrata invitase a Colbert a explicar su experiencia en una comparecencia ante la comisión de inmigración del Congreso. No se pierdan estos 5 minutos kafkianos en los que se dicen más verdades de las que escucharán nunca de sus representantes.
Gonzalo, pues si, tus seguidores no hemos pegado un ojo, y ahora apareces con esta nota magistral, que ya la estoy compartiendo con redes y amistades, y muchos que iremos al Foro Social Mundial de Migraciones. Para que nuestras preocupaciones y enojos frente a las políticas migratorias del norte estén aderezadas con un poquito de la irreverencia de Stephen Colbert, mostrándonos los absurdos de los temores del norteamericano (o europeo) medio frente a los migrantes. Gracias por este envío!
ResponderEliminarGracias a ti por tu comentario.
ResponderEliminarUn saludo,
Gonzalo
Gonzalo for president! ; )
ResponderEliminarLuisa
La intervención es magistral, sin ninguna duda. Pero, si el Parlamento español citara a Buenafuente a una comparecencia como experto en el tema, me preocuparía mucho y no por el contenido de su discurso, precisamente...
ResponderEliminar"Mi tatarabuelo no recorrió 4.000 millas atravesando el océano para ver a este país invadido por inmigrantes" Es una de las frases más claras y geniales. Si en la España cañí que se pasó la historia expulsando a moriscos, a judios o quemando a protestantes, el rechazo al inmigrante es absurdo, en una nación de aluvión como los EEUU es simplemente delirante.
ResponderEliminarComo decía una célebre encuesta canadiense sobre la definición de inmigrante: "Inmigrante es aquel que, en cuanto pone un pie en Canadá, dice 'estamos completos'"...
ResponderEliminarGracias a todos por vuestros comentarios.
Hola Gonzalo,
ResponderEliminarsolo por si te interesa para tu blog:
http://blogactionday.change.org/
Este año el tema es AGUA.
un saludo,
Roberto